Habría los ojos lentamente como esperando ver la luz
¡Decepción!
¡Que decepción!
Que desilusión se apodera de mi corazón.
Que terror tiene mi alma que no amanezca jamás,
mis ojos por cobardía se cerraron nuevamente.
Espero…
Esperaré me dije con temor
Espero y la desesperación hacía el tiempo eterno,
hacía mi oscuridad la mas larga de todas las esperas,
y apretando los diente, las encías me sangraron desmesuradamente,
sentía en la noche con mis ojos cerrados el sabor de mi sangre,
que brotaba,
brotaba…
Y yo esperando ver la luz,
con temor de abrir los ojos,
y sentir mi alma en oscuras todavía.