Mi cuerpo enfermo, angustiado y cansado
se encuentra con el rio de Merlo
y se escapa de mi, para sumergirse en el agua.
Desde lo alto de las montañas
el rio que lleva
los recuerdos de alguien
encapsulados en alguna piedra
un amor no dicho entre las mentas
una lagrima llevada por la corriente
que se pierde con el agua.
Las aguilas miran asombradas a los parapentes
y entre ellas cuchichean...que ilusion tan absurda pensarse un ave
Una perdiz sale de un Molle, mira de reojo
y se vuelve a esconder
esperando a que se acabe el bullicio de la gente.
Alla a lo lejos una piedra se cansa de estar en la montaña
y cae rendida en el suelo, provocando sobresaltos y miedo.
El Sol se va escondiendo, empujado por la Luna
y los turistas se van levantando muy despacio
pesados por el pan casero, los pastelitos y el vino patero
Yo, mientras tanto, me guardo la imagen del rio manso
con unas chicharras que me preanuncian una bella noche
me voy alejando a paso lento
con el cuerpo sano, alegre y energico.
