Tengo necesidad de vos
por costumbre, capricho o desesperación
del aire que sale de tu boca
la mirada de tus malignos ojos negros,
Del espacio naciente entre nosotros,
te roza, te acaricia te envuelve…
Lentamente separados del mundo
deseo tenerte, pegarte en mi piel
en la fogosidad de tus muslos
entrelazados, unidos…
Pero lo cierto es que
nos morimos, lo sabemos,
separados, uno del otro
caemos en múltiples pedazos
sobre cada paso hasta tu tumba.
allí te dejo, te veo alejarte tras la puerta
mirando tus movimientos
tu frescura, tu vida…
pero temo decirte que…
lo que busco, deseo y lo que amo…
lo tienes vos y espero
espero en tu puerta…