Partió una mirada
Sin dirección
entre las sombras del humo
te encontraba
con felicidad pagana,
una fatalidad sonando
a latidos de tango,
libertad prepotente, machista…
unas manos que se encuentran,
unos cuerpos que se expresan
en un dos por cuatro
marcado entre dos
uno lleva, ella se deja,
libertad y alarde
de piernas que se abren
se penetran
un juego de insinuación erótica,
labios, cuerpos, almas
que desean…
se estremecen
en un patio de arrabal.