Cada vez que termina el día
en esta ciudad infernal
se que miles dormirán solos,
otros tanto…
ni cama para dormir,
pero si un lugar donde,
tirar los huesos,
los roñosos cuerpos
tan sucios y emponzoñados.
Así estamos cuando termina cada día,
así estamos una vida entera
después de cada día,
las noches ensombrecidas cubren todo;
el odio,
la sospecha,
Las sabanas quedarán tiznadas
con el eco de los insultantes gritos…
sonando en nuestros oídos.
Con la enorme amargura
de afrontar de nuevo
otro día,
Pero mañana me habré olvidado
de todo, casi todos…entonces,
Desde esta cama
con sabanas tan sucias
les doy las buenas noches.